Reforma energética; deja solo una duda

El mandato del actual presidente Enrique Peña Nieto, ha sido objetivo de duras críticas por diversos motivos, empezando por los famosos tres libros, pasando por el copete e incluso por un par de calcetas. Todos esos temas carecen de una importancia real para el país, existen
claro muchas otras cuestiones de interés nacional, como el caso ayotzinapa en materia de seguridad, el caso de la "casa blanca" en materia de transparencia, y en materia de economía se encuentran las reformas, una de las cuales es la energética.

Esta reforma desde el inicio fue repudiada por los partidos de oposición, se dijeron muchas cosas, como por ejemplo que se regalaría el petroleo nacional, el patrimonio de los mexicanos, algunos se aventuraron a decir, que esta reforma acabaría con la soberanía del país, etc. Se criticó de tan especial manera esta reforma, que es difícil discernir, qué es verdad y qué es mentira.


Petróleos mexicanos (PEMEX) es la empresa mas importante del país, genera gran parte del producto interno bruto (PIB) y del presupuesto de la nación. Es el octavo productor de crudo a nivel mundial y el tercer mayor exportador de petróleo a los Estados Unidos de América, por señalar solo dos importantes puntos con los que cuenta esta empresa. Todo lo anterior mencionado, lo logra sin contar con la tecnología de punta que necesita una empresa de este calibre.


Lo que busca la reforma energética es modernizar a PEMEX, una de las empresas mas importantes del mundo, ¿Para qué? Sencillo, hacerla aún más grande, con una estimada inversión de 55.5 mil millones de dolares, PEMEX generará medio millón de empleos en este sexenio y se estima que serán dos millones y medio de empleos para 2025.

No existirá privatización, solo concesiones a empresas privadas, las cuales explorarán algunas áreas, en búsqueda de petróleo o gas, y lo extraerán, a cambio PEMEX recibirá aproximadamente el 30%  de las ganancias. ¿Entonces PEMEX perderá? No, PEMEX no perderá con esta reforma, obtendrá aproximadamente el 30% de las ganancias del petróleo y gas que no explota actualmente. En resumen, empresas privadas, nacionales o internacionales, invertirán su dinero, pondrán a disposición de PEMEX su maquinaria, explorarán, extraerán el petróleo y pagarán aproximadamente el 30% de lo que ganen a PEMEX, quien seguirá produciendo por su cuenta el mas de trillón de dolares que produjo el año pasado.

Para el año 2016, según Luis Videgaray, el precio de la gasolina comenzará a liberarse a raíz de esta reforma, esto tendrá como consecuencia una guerra de precios, en donde podremos contar con mas opciones en las gasolineras, no habrá un precio único, el resultado es un precio menor en la gasolina con una alta calidad.

Esta reforma es el paso siguiente a la expropiación petrolera efectuada en el mandato de Lázaro Cárdenas. Estamos ante una reforma histórica no solo para México, sino para la industria petrolera, lo cual me deja solo una duda ¿Por qué no se hizo esta reforma, hace cincuenta años?.

E Muñoz A.